ayer, de nuevo en tertulia de amigos y de trabajo, descorchamos una botella de Misión, de la Bodega Santo Tomás.
la charla giró en torno a tópicos relacionados al derecho administrativo, rama que ha avanzado mucho en el País, y que no obstante ese enorme avance, es insuficiente para dotar de eficiencia y de eficacia a las instituciones, sobre todo a los ayuntamientos, que son el ejemplo del peor derecho administrativo.
en fin, al marco de tan ínsipda charla, pusimos el carbón a punto de brasa, y sobre la misma, aventamos chayote y betabel a la parilla, unas cebollas y morrones verdes y unos cortes de la consabida arrachera del norte.- buena armonia entre el Tinto en cuestión, de buen ver, de reflejos claros, aroma a mis añoranzas de plantas del desierto, a brisa marina ( me juega bromas mi imaginación, o será que mi cata es empírica, matizada de experiencias sensoriales a rancho del cual provengo), al probarlo se define un cuerpo ligero, agradable para armonizarlos con taco de tortilla de harina, con arrachera, morrones y cebolla a la brasa, y salsa de molcajete old fashion, ( con poco picante, sino, desmerece al Vino) buen tinto, de persistencia breve, pero evocadora de playas, montañas y desierto al declinar la tarde.
Qué bueno todo lo que nombras! Sabés de algún blog que ponga recetas mexicanas buenas? Por aquí son variantes como pasas con la china o la judía de la que me encantan los postres.
ResponderEliminarUn abrazo cordial
Quise decir "pasa con la china! Veo que tenés nostalgia de tu rancho, nos pasa a varios que anduvimos por el mundo. Saludos
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